El desafío del gobierno abierto
Únase a cientos de reformadores de todo el mundo (en el gobierno y la sociedad civil) que están trabajando para hacer que sus comunidades sean más fuertes, más abiertas, participativas, inclusivas y responsables.
La policrisis global que enfrentamos actualmente (que incluye el retroceso democrático, los conflictos, la emergencia climática y problemas profundos de injusticia) no hace más que profundizarse. Estos problemas se manifiestan de diferentes maneras, pero sus soluciones incluyen un hilo común: la gobernanza abierta. Desde la guerra en Ucrania hasta la crisis económica en Argentina y la corrupción en Estados Unidos, los gobiernos se están uniendo con organizaciones de la sociedad civil, los medios de comunicación y el sector privado para impulsar sistemas de toma de decisiones más abiertos, transparentes y justos.
OGP, con el proceso de colaboración que implica, el profundo conocimiento que posee y la vibrante comunidad que reúne, nunca ha sido más importante. Por cada déspota que espera cerrar el espacio cívico o populista que trabaja para excluir voces de la toma de decisiones, hay reformadores que presionan para abrir sistemas y redes que colaboran para mejorar la inclusión desde abajo.
Como se señala en la nueva estrategia de OGP, OGP representa la “alternativa esperanzadora”; en 2024 pretendemos demostrar por qué es así. Trabajaremos con la comunidad de OGP en todos los niveles para hacer esto centrándonos en cuatro áreas clave de trabajo dentro de la asociación, como se describe con más detalle en la nota técnica adjunta.
Primero, vamos a impulsar una coalición global más fuerte y política para un gobierno abierto y fortaleceremos el apoyo político en todos los niveles para OGP. Hay muchas herramientas técnicas que pueden usarse para mejorar la gobernanza, pero en el fondo se trata de un proceso político, que requiere comprender intereses, construir relaciones y cambiar incentivos. OGP tiene una capacidad única para unir a las personas, debido al diseño colaborativo de la asociación, y debemos demostrar el valor de esto para las agendas políticas nacionales y globales.
En segundo lugar, vamos a posicionar a OGP como una plataforma orientada a la acción para abordar desafíos geopolíticos apremiantes y fortalecer las relaciones con otros socios regionales y globales. La evidencia es clara: OGP genera acción en una amplia gama de desafíos, con más de 4,000 compromisos en todo el mundo hasta la fecha que conducen a cambios catalíticos en políticas en todos los ámbitos, desde la corrupción hasta la equidad de género. También proporciona la plataforma esencial a través de la cual los compromisos asumidos a nivel global en otros foros pueden traducirse en realidades a nivel nacional y local. Este es un mecanismo fundamental de rendición de cuentas para los gobiernos.
En tercer lugar, esperamos presionar a los miembros de OGP (nacionales y locales) para que sean más ambiciosos y se desafíen a sí mismos y a otros en temas clave que afectan a los países de OGP, en particular la gobernanza digital, la justicia climática y la inclusión. Es hora de que el movimiento de gobierno abierto se levante y aproveche el momento en estos temas. Esto significa no sólo impulsar a los gobiernos y sus aliados de la sociedad civil a ser más ambiciosos, sino también reconocer y celebrar públicamente el progreso de maneras que puedan contrarrestar las narrativas políticas negativas.
Finalmente, a medida que OGP se embarque en una nueva estrategia, trabajaremos con los miembros de la Unidad de Apoyo y la comunidad para garantizar que OGP esté preparada para el futuro para los desafíos que enfrentaremos colectivamente en el futuro; y que OGP sea capaz de crecer, adaptarse y mejorar con el tiempo.
Los problemas que enfrentamos evolucionan rápidamente y es esencial que cualquier organización que intente cambiar la dinámica de gobernanza siga siendo ágil, flexible y, sobre todo, receptiva a las necesidades de sus miembros. Este año, después de una década de trabajo, es el momento perfecto para que OGP construya la plataforma sobre la cual se puedan construir los próximos diez años de gobernanza abierta.
Gobierno de Kenia y Blair Glencorse Agenda del copresidente de OGP 2023-2024:
Implementaremos nuestra visión de copresidencia a través de las siguientes prioridades, todas alineadas con la estrategia 2023-28 de OGP:
Construir una coalición global más fuerte y política para un gobierno abierto y fortalecer el apoyo político a OGP.
- Promover y fomentar la cooperación y coordinación regional organizando importantes reuniones regionales en África, Medio Oriente y América, y preparándose para un evento de Asia y el Pacífico en 2025.
- Organizar el evento OGP a nivel de Jefes de Estado/Gobierno al margen de la Asamblea General de las Naciones Unidas 2024.
- Aliente y apoye a los nuevos miembros de OGP a unirse.
- Elevar a OGP Local y promover una mayor participación de la comunidad local en la implementación de la estrategia de OGP.
Posicionar a OGP como una plataforma orientada a la acción para abordar desafíos geopolíticos apremiantes y fortalecer las relaciones con otros socios regionales y globales.
- Dar prioridad a un conjunto de instituciones globales y regionales para aumentar la visibilidad de OGP y fomentar una participación más activa.
- Mejorar la participación y colaboración entre las cancillerías en OGP para conectarse mejor con otras plataformas globales.
Avanzar en el mundo Desafío de gobierno abierto.
- Aprovechar la oportunidad del desafío para promover políticas y asociaciones de gobierno abierto en tres temas clave: gobernanza digital, clima e inclusión.
Fortalecer la asociación
- Construir una cartera de posibles nuevos miembros y copresidentes del Comité Directivo de OGP.
- Fomentar una mayor aceptación de las contribuciones financieras de los miembros.
- Concluir la Revisión de Gobernanza de OGP y comenzar la implementación de las recomendaciones para alinear las estructuras de la asociación con la nueva estrategia.
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