Cambio de comportamiento para una exitosa agenda de gobierno abierto en Jalisco, México
Cambio de comportamiento para una agenda exitosa de Gobierno Abierto en Jalisco, México
Un gobierno abierto plan de acciónLos planes de acción son el núcleo de la participación de un gobierno en OGP. Son el producto de un proceso de co-creación en el que el gobierno y la sociedad civil desarrollan conjuntamente compromisos de gobierno abierto... tiene dos expectativas: un gobierno abierto institucionalizado y la posibilidad de resolver un problema social previamente identificado a través de una proceso de cocreaciónLa colaboración entre el gobierno, la sociedad civil y otras partes interesadas (p. ej., ciudadanos, académicos, sector privado) está en el centro del proceso de OGP. Los gobiernos participantes deben garantizar que una inmersión... con la sociedad Los objetivos de implementar un plan de acción son practicar los principios de gobierno abierto durante todo el proceso y los resultados obtenidos en términos de grados de apertura así como los resultados en la promesa de que cada compromisoLos compromisos de OGP son promesas de reforma creadas conjuntamente por los gobiernos y la sociedad civil y presentadas como parte de un plan de acción. Los compromisos suelen incluir una descripción del problema, una acción concreta... lleva; no solo porque contribuyen a construir un gobierno más receptivo, sino que la obtención de resultados tangibles, coherentes y útiles determina si el gobierno abierto como práctica de gestión pública es de hecho una alternativa efectiva a ser adoptada a mayor escala. Las experiencias exitosas en procesos y resultados son una fuerza motivadora para que los servidores públicos actúen siempre de acuerdo con los principios de gobierno abierto, y para que los practicantes de la sociedad civil confíen en su gobierno y sigan participando en estos procesos. Siguiendo esta línea de pensamiento, un plan de acción de gobierno abierto no es solo una herramienta para obtener resultados específicos, sino que es una punta de lanza para introducir gradualmente nuevas prácticas de gestión y modificar actitudes y comportamientos en los servidores públicos hacia una administración pública más abierta, y eventualmente , una transformación de las estructuras de gobierno.
A medida que el estado de Jalisco, México, implementa su segundo plan de acción de OGP, vale la pena echar un vistazo a las lecciones y los resultados del plan de acción anterior. Jalisco implementó su primer plan de acción como parte del programa piloto subnacional de OGP de 2016 a 2018. Una evaluación externa de este proceso se encargó en 2018 para arrojar una luz sobre el estado de los compromisos y lo que logró el gobierno abierto, desde el Tablero de instrumentos de la Secretaría Técnica Local informaron resultados que, según los participantes, no reflejaron la realidad de lo que se logró o la experiencia que tuvieron durante todo el proceso. Teniendo en cuenta que el proceso de rendición de cuentas de la Secretaría se centró en el cumplimiento de las actividades acordadas en los planes de trabajo, los resultados del cumplimiento se consideraron positivos. Sin embargo, y a pesar del alto porcentaje de cumplimiento, los compromisos no produjeron los resultados esperados en términos de un enfoque de gobierno abierto más amplio o de implementar la solución propuesta al problema que cada compromiso fue diseñado para resolver. En este escenario, donde un plan de acción no logra resultados pero los implementadores lo evalúan como que ha completado el 96% de las metas y actividades, el riesgo de recompensar actitudes y comportamientos que no conducen a una práctica correcta a menudo va en detrimento de la apertura. gobierno como alternativa de gestión pública.
Partiendo de la premisa de que los resultados obtenidos por los compromisos contribuyen a sentar las bases de una experiencia exitosa con el gobierno abierto, y esto a su vez favorece una mayor adopción de estos principios en las administraciones públicas, entonces este plan de acción no cumplió este objetivo, ya que el enfoque de implementación no fue lograr resultados ni estar más cerca del gobierno abierto. Esto es evidente por el diseño de los compromisos y sus objetivos medibles, que se centran más en el procedimiento, y sus hitos no conducen a los productos o resultados esperados o obtenidos. Además, los resultados esperados no son claros y solo pueden inferirse mediante la descripción inicial de los compromisos.
Otro supuesto importante en la agenda de gobierno abierto es que, mientras los principios de gobierno abierto y los resultados de los compromisos se pongan en práctica en el proceso de implementación, habrá un gobierno más abierto. En este plan de acción, cabe señalar el desajuste con los principios de gobierno abierto de algunos de los compromisos. Al menos dos compromisos utilizaron plataformas tecnológicas de recolección de información para el diseño de políticas. Incluso si las necesidades existen y deben ser atendidas, ni los procesos ni los resultados son relevantes para los principios de gobierno abierto más allá de ser una solicitud de la sociedad civil (que no se cumplió). Ocurrió lo contrario con un contratación abiertaUn proceso de contratación transparente, conocido como contratación abierta, aumenta la competencia, mejora la prestación de servicios públicos y garantiza a los gobiernos un mejor valor por su dinero. Especificaciones técnicas: C... Más plataforma, que fue diseñada de acuerdo a estándares internacionales y procesos participativos, pero nunca estuvo operativa. Se puede argumentar que la intención de abrir el gobierno es clara, sin embargo, no se tomaron medidas para realizar esta intención. el elemento de participacion ciudadanaDe acuerdo con los Artículos de Gobernanza de OGP, la participación ciudadana ocurre cuando "los gobiernos buscan movilizar a los ciudadanos para que participen en el debate público, brinden aportes y hagan contribuciones que conduzcan a m ... Más Ocurrió que el proyecto fue una solicitud de los ciudadanos que el gobierno adoptó y no cumplió con la intención de la plataforma. Esta experiencia no es ideal para generar actitudes positivas hacia los principios de gobierno abierto, ni hacia la viabilidad de los procesos participativos.
Solo hay un compromiso que, de acuerdo con la evaluación externa, alcanzó su objetivo, arrojó resultados y cumple con los principios de gobierno abierto. Este compromiso llevó a cabo sesiones de co-creación y dinámicas de rendición de cuentas con los beneficiarios directos convertidos en tomadores de decisiones a lo largo de todo el proceso de diseño e implementación. De los siete compromisos de este plan de acción, este es el único que cumplió sus objetivos de abrir gobierno a través de dinámicas alineadas con los principios de gobierno abierto, creando así una experiencia que permitirá el desarrollo de actitudes positivas hacia el gobierno abierto.
En entrevistas con implementadores del gobierno y de la sociedad civil, reflejan, en retrospectiva, cómo las entidades gubernamentales no siempre buscaban lograr una transformación real; en varias ocasiones no incentivó a la sociedad civil a participar, ni utilizó el espacio para promover y socializar proyectos gubernamentales. Estas actitudes negativas hacia lo que representa el gobierno abierto fueron respaldadas como adecuadas en el momento en que la Secretaría clasificó los compromisos que no tienden a los resultados esperados como completados, desincentivando a las partes interesadas para mejorar los procesos o reconocer y aprender de estos errores.
Pero no todo es negativo: algunos servidores públicos destacaron los beneficios de conocer las perspectivas de los ciudadanos y reconocieron la experiencia y el conocimiento que aportaron a los procesos de toma de decisiones. La Secretaría Técnica Local era una plataforma que siempre estaba abierta a la sociedad civil, incluso cuando los procesos de seguimiento no siempre eran así. Ahora se siembra la semilla de la apertura a la participación ciudadana y, en el futuro, se deben buscar formas y mecanismos más institucionalizados para fortalecer su posición ante los tomadores de decisiones gubernamentales y crear reglas claras sobre los roles y el empoderamiento de la sociedad civil. También sería importante centrarse en la participación de los funcionarios que implementan los compromisos en el proceso de toma de decisiones y en la Secretaría Técnica Local, ya que más que un órgano político o de supervisión, es un espacio de co-creación y aprendizaje, donde La experiencia directa de implementación podría enriquecer el ejercicio y obtener mejores resultados. Asimismo, creará capacidades directas en los funcionarios y, por lo tanto, sería un primer paso para la institucionalización de principios y prácticas de gobierno abierto en la estructura de toma de decisiones dentro de las agencias participantes.
En suma, se debe diseñar un plan de acción con la intención de reconstruir la dinámica, fortalecer la confianza en el gobierno e institucionalizar las mejores prácticas. Sin esta intencionalidad consciente entre las partes para crear una nueva relación, será difícil que el gobierno se abra y que esta apertura se institucionalice como una práctica diaria en el gobierno. Si la primera experiencia de gobierno abierto no provoca los incentivos y actitudes necesarios a través de la obtención de resultados específicos de gobierno abierto, pero también mostrando un claro avance hacia la solución de los problemas que cada compromiso aborda, será una agenda que apenas trascenderá lo suficiente para transformar las prácticas de gestión pública.
Un plan de acción de gobierno abierto tiene dos expectativas conforme a lo que promueve: apertura gubernamental institucionalizada y un acercamiento a la solución de problemas sociales identificados a través de procesos de co-creación con la ciudadanía. Los objetivos de la implementación de un plan de acción son poner en práctica los principios de gobierno abierto, los resultados alcanzados en grados de apertura gubernamental y el producto de cada uno de los compromisos; no sólo porque contribuyen a la construcción de un gobierno más responsivo, sino que la obtención de resultados tangibles, coherentes y útiles determina si esta manera de hacer gestión pública es una alternativa eficaz para ser adoptada a gran escala. Las experiencias exitosas en procesos y resultados sirven como fuerza motivacional a los funcionarios públicos para actuar siempre conforme a los principios de gobierno abierto en el ejercicio de sus funciones, y de los actores de sociedad civil de confiar en gobierno y seguir participando en estos ejercicios. De esta manera, un plan de acción de gobierno abierto no es solamente una herramienta para lograr resultados específicos, sino que es una punta de lanza para introducir nuevas prácticas de gestión y modificar los hábitos y actitudes de los servidores públicos hacia un ejercicio abierto de la administración pública, y así, transformar la estructura gubernamental.
A manera que el estado de Jalisco, México está implementando su segundo plan de acción, es importante revisitar las lecciones y resultados del primer plan de acción que se implementó como parte del programa piloto subnacional de la Alianza para el Gobierno Abierto (OGP por sus siglas en inglés) durante 2016-2018. Se hizo una evaluación externa a este proceso en el 2018 con el objetivo de conocer el estado que guardan los compromisos de Jalisco, pues el proceso de rendición de cuentas del Secretariado Técnico Local a sentir de los participantes, no reflejó lo que se logró con los compromisos ni la experiencia que se tuvo durante el proceso. Si bien el proceso de rendición de cuentas del propio Secretariado Técnico se enfocó en el cumplimiento de las actividades de los planes de trabajo, el resultado de cumplimiento es en sí favorable. Sin embargo, y a pesar del alto porcentaje de cumplimiento, los compromisos no produjeron los resultados o productos esperados ni en términos de un acercamiento a un gobierno más abierto ni en la puesta en práctica de la solución propuesta a la problemática que cada compromiso abordó. En este escenario, donde un plan de acción no consigue resultados pero es calificado por los mismos implementadores con cerca de 96% de cumplimiento de metas y actividades, se corre el riesgo de premiar actitudes y comportamientos no conducentes a una práctica adecuada en detrimento de gobierno abierto como una alternativa de cómo se debería ejercer la función pública.
Si partimos de la premisa de que los resultados de los compromisos contribuyen a sentar las bases de una experiencia exitosa en gobierno abierto, y esto favorece una mayor adopción de los principios de gobierno abierto en la administración pública, entonces este plan de acción de gobierno abierto deja mucho que desear ya que el enfoque de la implementación no era alcanzar resultados ni acercarse más a un gobierno abierto. Esto es evidente en el diseño de los compromisos y sus objetivos medibles, los cuales se enfocan más en el procedimiento y sus hitos no conducen a los resultados esperados o adquiridos. Así mismo, los resultados esperados no eran claros y solo pueden ser inferidos por la descripción inicial de los compromisos.
Partiendo de otro supuesto importante de la agenda de gobierno abierto, que en la medida en que se ejerzan los principios de gobierno abierto en los procesos y como productos u objetivos de los compromisos, entonces se tendrá un gobierno más abierto. Dos compromisos utilizaron plataformas tecnológicas para recopilar información para diseñar las políticas. Aunque las necesidades existan y deban ser abordadas, ni el proceso ni los resultados son relevantes para los principios de gobierno abierto más allá de ser una petición de la sociedad civil (que no se cumplió). Lo contrario ocurrió con una plataforma de contratación abierta, la cual fue diseñada de acuerdo a estándares internacionales y procesos participativos, pero nunca fue operacional. Se puede argumentar que la intención de abrir el gobierno a través de esa plataforma es clara, sin embargo no existieron acciones conducentes a materializar esta intención. El elemento de participación ciudadana sucedió en que el proyecto fue una petición ciudadana que el gobierno adoptó, y no cumplió con la intención de la plataforma. Esta experiencia no es ideal para generar experiencias positivas con el ejercicio ni actitudes positivas hacia la viabilidad de procesos participativos.
Sólo hay un compromiso que, según la evaluación externa, tiene un alto grado de cumplimiento con resultados demostrables y cumple con los principios de gobierno abierto. Este compromiso mantuvo procesos de co-creación, participación ciudadana y dinámicas de rendición de cuentas con los beneficiarios de manera permanente, desde el diseño hasta la implementación. De los siete compromisos del plan de acción, solamente éste cumplió con los objetivos del compromiso y de apertura gubernamental a través de dinámicas alineadas a los principios de gobierno abierto creando la experiencia que permitirá el desarrollo de actitudes positivas hacia gobierno abierto.
En entrevistas con los implementadores de los compromisos tanto de gobierno como de sociedad civil describen, en retrospectiva, que el gobierno no siempre buscó una transformación real; en varios momentos no incentivó la participación ciudadana, o utilizaron el espacio para difundir o socializar los proyectos de gobierno. Estas actitudes negativas hacia gobierno abierto quedaron ratificadas como correctas en el momento en que el propio Secretariado Técnico Local calificó como cumplidos los compromisos que no alcanzaron los resultados o herramientas prometidos, creando desincentivos para mejorar los procesos o reconocer y aprender de los errores.
Pero, no todo es negativo: algunos funcionarios públicos destacaron las bondades de conocer las perspectivas ciudadanas y de reconocer la experiencia y conocimiento que aportan a la toma de decisiones, y el Secretariado Técnico Local fue una plataforma abierta a la sociedad civil, aun cuando en el seguimiento específico a compromisos las experiencias hayan sido variadas. La semilla de la apertura a la participación ciudadana está sembrada y se deberán buscar formas y mecanismos más institucionalizados para fortalecer su posición ante tomadores de decisiones gubernamentales y crear reglas claras en cuanto a roles y empoderamiento de la sociedad civil. Asimismo, sería importante enfocarse también en la participación de los funcionarios implementadores de los compromisos en la mesas de toma de decisiones y en el Secretariado Técnico Local, pues más que un órgano político o de supervisión, es un espacio de co-creación y aprendizaje, donde la experiencia directa de implementación podría enriquecer el ejercicio y obtener mejores resultados. Asimismo, creará capacidades directas en los funcionarios, y por tanto, sería un primer paso para la institucionalización de principios y prácticas de gobierno abierto en la estructura de toma de decisiones dentro de las dependencias participantes.
Un plan de acción debe diseñarse con la intención última de reconstruir dinámicas, fortalecer la confianza en el gobierno, e institucionalizar las buenas prácticas. Sin esta intencionalidad consciente entre las partes por crear una nueva relación es muy difícil que el gobierno se abra y que esa apertura se institucionalice como una práctica cotidiana en el gobierno. Si la primera experiencia de gobierno abierto no logra sembrar los incentivos y actitudes necesarios, a través de la obtención de resultados específicos en términos de gobierno abierto, pero también de la solución de las problemáticas planteadas al inicio, difícilmente será una agenda que pueda trascender lo suficiente para transformar las prácticas de gestión gubernamental.
Deje un comentario